¿Qué es el calambre o espasmo muscular? Síntomas, causas y tratamiento

El calambre o espasmo muscular es una contracción espontánea,  involuntaria y muy violenta de un músculo o grupo muscular.

Se puede producir en cualquier músculo del cuerpo, y el músculo se paraliza en la contracción sin poder relajarse y te ves obligado a parar en la actividad.

Síntomas del calambre

Se puede producir durante el ejercicio o en reposo. Son típicos en gemelos e isquiotibiales, y pueden derivar o estar causados por otro tipo de lesión muscular.

El músculo se endurece y se siente mucho dolor, aunque la intensidad de este depende de la gravedad del calambre.

En algunos casos se abulta y a veces se describe como un nudo. La zona resulta muy sensible al tacto, pero el dolor y la intensidad del dolor pueden ser variables.

Causas del calambre

Puede estar provocado por agotamiento muscular, y normalmente sucede cuando el músculo está contraído, aunque puede aparecer varias horas después.

Sobreestimulación nerviosa

Sin embargo, el calambre no depende del trabajo muscular en sí, sino al aumento de la estimulación nerviosa sobre el músculo.

Un músculo se puede acalambrar si se irrita el nervio que lo dirige. Por ejemplo, la hernia discal irrita los nervios espinales y produce el dolor y el espasmo muscular en la espalda.

Por otro lado, si se alteran las condiciones en las que el músculo desarrolla su trabajo, se hace vulnerable a sufrir calambre.

Circulación sanguínea

Una mala circulación sanguínea puede producir calambres. En este sentido, el uso de ropa apretada (unos calcetines que opriman por ejemplo), puede influir en este sentido.

Mala hidratación

Una mala hidratación, y un bajo nivel de sales en sangre (calcio, potasio y magnesio) pueden provocar también los calambres. El zumo de naranja y los plátanos pueden elevar nuestro nivel de potasio.

En esta línea, son bastante frecuentes durante el tiempo caluroso y aunque no se ha especificado la razón se asocian al agotamiento de la sal.

Sin embargo, en estos casos el desequilibrio de sales y fluidos viene acompañado de algún pequeño desgarro muscular. En este sentido, el calambre puede aparecer en el momento o varias horas después.

En este sentido el calambre puede ser un aviso de otro tipo de lesión muscular y se produce inmediatamente después, para proteger la musculatura de algún tipo de movimiento.

Si se dan a menudo habría que ir al médico por si hay algún problema vascular o neurológico.

El calzado inapropiado

El uso de un calzado inapropiado, ya sea por el número, por llevar tacones altos, o por usar calzado con suelas planas (sandalias) sin almohadillado, ni sujeción adecuada para el pie.

Los calambres más habituales

Los más comunes son los que se producen en la pantorrilla al nadar o por la noche al dormir. Estos últimos se pueden producirse simplemente por la tensión que ejerce el peso de las sábanas sobre el pie.

También la parte superior del muslo suele sufrirlos, pero en este caso por la realización de movimientos muy violentos.

Tratamiento

El calambre se percibe sin ningún tipo de dudas por la aparición de un dolor intenso y rigidez en la musculatura.

La primera reacción es la de parar inmediatamente y buscar una posición en la que el músculo afectado no tenga que moverse.

 

Estiramiento muscular

Hay que estirar el músculo para aliviar el espasmo. Es importante en el estiramiento vencer la resistencia para que el músculo recupere su longitud normal, aunque al principio duela un poco.

Si el estiramiento alivia el calambre, se puede reanudar la actividad sin peligro, aunque podemos notar la zona molesta. Si la intensidad es intensa, lo mejor es cambiarla por otra más ligera.

Sin embargo, si el calambre vuelve a aparecer es posible que se trate de un desgarro muscular. En este caso, lo mejor es dejar de entrenar y tratar la lesión.

Visitar al médico

Si el dolor persiste, habría que visitar al médico para que nos prescriba algún tipo de antiinflamatorio o el medicamento que proceda.

Masaje

Es bueno masajear el músculo acalambrado para dar calor y relajar la musculatura.

Para relajar el músculo también podemos aplicar calor en los primeros momentos. Este calor se puede proporcionar empapando el músculo con agua tibia o aplicando una crema relajante para la musculatura.

Hielo

Cuando el dolor ha disminuido aplicamos hielo para la inflamación.

Bebidas isotónicas

Las bebidas isotónicas, reducen la fatiga y ayudan a recuperar.